El Telégrafo 14/02/2015
El aguacero acompañado de granizo sorprendió a la capital a partir de las 15:00.
La lluvia de la tarde de sabado 14 de febrero causó estragos en el sur de Quito. Después de una mañana soleada, pasadas las 15h00 una granizada colapsó al barrio Atahualpa, cerca de la Tribuna del Sur.
Dos vehículos quedaron atrapados en medio de una capa de hielo que superó los 50 cm sobre la Av. Teniente Hugo Ortiz. Los moradores del sector ayudaron a los conductores a desbloquear la vía con baldes y palas. El último en salir, después de 3 horas de trabajo, fue un automóvil rojo, cuyo conductor estaba a dos cuadras de su casa. "Todo pasó en 15 minutos. Mi hijo conducía el auto y no imaginó que quedaría atrapado en el hielo cuanto intentaba llegar a su casa. Les agradezco a los vecinos por ayudarnos a mover el vehículo", dijo Francisco Tipán.
Con el granizo los sumideros se taparon y eso provocó que el agua inunde el único local del sector. María Flores, propietaria de Súper Bahía y moradora del sector desde hace más de 20 años, contó que cerca de las 15:30 el agua ingresó a su negocio y alcanzó los 10 cm de altura, por lo que tuvo que recoger los artículos que las estanterías más bajas. "Fue un gran susto. Llamé inmediatamente a los Bomberos pero se demoraron. Todo el local se inundó", se lamentó la mujer de 73 años, quien recuerda que un episodio parecido ocurrió hace más de 15 años. Su preocupación está en que los sumideros están tapados por las raíces de uno de los árboles que adornan el parterre, por lo que pide la intervención urgente del Municipio.
La circulación en las principales avenidas de Quito también se afectó. El túnel de San Juan, en el centro, se cerró temporalmente por la acumulación de agua. Lo mismo ocurrió en el sector de Santo Domingo y La Recoleta, en el Centro Histórico.
Pero el impacto fue mayor en el barrio Quito Sur. Tres viviendas resultaron afectadas por la pertinaz lluvia. Dos de ellas almacenaban materiales y se perdieron. Mientras que la tercera funcionaba como asilo de ancianos, pero las instalaciones no cuentan con los permisos y se produjo una filtración importante de agua, por lo que será evacuada, informó Christian Rivera, coordinador del Comité de Operaciones de Emergencia (COE) de Quito.
En San Martín, en el suroriente de la capital, en cambio un remolino de viento arrasó con los techos de 4 viviendas. Los moradores del sector trabajaron intensamente para restituir las hojas de zinc arrancadas por el viento, que además se llevó la ropa de los tendederos.
Y en las laderas del Pichincha se produjeron dos deslizamientos de tierra, por lo que maquinaria de la Empresa Metropolitana de Obras Públicas acudió al sitio para rehabilitar esas vías secundarias. En total, el COE desplazó a 80 personas para atender las emergencias.
Pero si algo positivo dejó la lluvia, es que ayudó a bomberos y militares a controlar el incendio forestal que se produjo esta mañana en el sector de Nono. Después de 12 horas de trabajo, el agua permitió controlar el fuego, que consumió 8 hectáreas de pajonales, lo que afecta a la vida silvestre del sector.
Rivera indicó que el Inamhi prevé que el invierno sea más fuerte en abril y mayo, mucho más severos de lo ocurrido esta tarde, por lo que pide a la ciudadanía tomar precauciones como la limpieza de sumideros.